jueves, 30 de enero de 2014

Pan Naan para el reto Bake the World

Ya retomada definitivamente la rutina más o menos normal, me reengancho de nuevo a los retos de Bake the World  que, desafortunadamente, tuve que dejar pasar en diciembre. Y este mes la propuesta es de lo más atractiva, pues se trata de uno de los panes más típicos de la India, el pan naan. Se trata de un pan plano, con poca levadura, que se cocina en unos hornos especiales, llamados Tandoori, y que suele acompañar los aromáticos guisos hindúes. Existen diversas versiones de este pan, algunas llevan especias (como cominos o ajo) y otras un poco de queso. En cualquier caso, es muy sencillo de hacer y bastante rápido. Yo me he decantado por la receta que se comparte en el blog Cocinando entre Olivos, que está muy bien explicada y tiene una atractiva combinación de especias.


El resultado es un pan crujiente por fuera y tierno por dentro, con un delicado sabor que combina estupendamente con un buen curry o con un pollo korma, como ha sido mi elección de hoy.


Ingredientes (8 piezas):
300 gr. de harina de fuerza
1 yogur griego
1 cucharada de ghee (yo usé mantequilla derretida)
80 ml. de agua templada
6 gr. de levadura fresca
1 cucharadita de cominos molidos
1 cucharadita de ajo molido
8 gr. de sal

 Desleir la levadura en el agua templada y echar todos los ingredientes en el vaso de la Thermomix. Amasar 3 min. en vel. espiga. Hacer una bola y dejar reposar en un bol engrasado hasta que doble su volumen. Dividir la masa en 8 bolitas y estirarlas con el rodillo. Colocarlas en una bandeja de horno y espolvorearlas con cilantro fresco picado, o pimienta negra molida. Hornear al horno precalentado a 230º unos 10 min., o hasta que empiecen a dorarse. Al sacarlos del horno, pincelarlos con mantequilla derretida o con aceite de oliva virgen extra (eso hice yo). Servir calientes.







Es un pan que está tan bueno, que a mi no me importa nada tomarlo solo, pero es una delicia como acompañamiento de un pollo korma, (es un tipo de curry muy suave, hecho con yogur)





 Hasta el mes que viene!



sábado, 25 de enero de 2014

DONUTS PARA WHOLE KITCHEN

Whole Kitchen en su propuesta dulce para el mes de enero nos invita a preparar un clásico de la cocina norteamericana: Donuts.
Esta es una de las recetas que tenía pendiente preparar en casa y hasta ahora no había encontrado el momento. La verdad es que tenía entendido que era imposible reproducir el sabor que tenemos asociado a los donuts en casa y entre eso y que es un dulce frito y calórico, iba bajando puestos en mi lista de pendientes... ¡qué error! ¡si es que nos han gustado más que los donuts comerciales! Por lo menos con esta receta, el resultado es sabroso, esponjoso y ligero (dentro de lo que cabe, claro), de forma que ha quedado entre los favoritos de la tropa. La receta que he seguido está sacada al pie de la letra del blog Kanela y Limón, (¡imposible equivocarse!) donde se explica fantásticamente bien.


He optado por un glaseado clásico, que le da un toque crujiente al mordisco y, por supuesto, los agujeros que sacamos de hacer las rosquillas han sido convenientemente aprovechados...


Me hubiera gustado tener mejores fotos de la miga, pero ¡no me dio tiempo!


Ingredientes y elaboración (12 unidades):

Prefermento:
140 gr. de harina de fuerza
90 gr. de agua tibia
3 gr. de levadura fresca

Desleir la levadura en el agua tibia. Unir los ingredientes hasta hacer una bola y dejarla reposar tapada con papel film hasta que doble su tamaño. (Aproximadamente 1 hora).


Masa principal:
15 ml de leche tibia
20 gr. de levadura fresca
125/150 gr. de harina de fuerza
30 gr. de azúcar
5 gr. de sal
4 yemas de huevo
60 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
Semillas de cardamomo
Aceite de girasol para freir

Para la elaboración de la masa conté con la inestimable ayuda de la máquina panificadora. Se disuleve la levadura en la leche tibia y se echa en la cubeta. Se añade el azúcar y la harina y se programa amasado (en mi máquina dura 15 minutos) Al tener muy poco líquido, cuesta que se forme la masa, por lo que hacia el minuto 8 se añaden las yemas, la sal y el cardamomo y hacia el 13 la mantequilla. Cuando acaba, se vuelven a programar 15 minutos de amasado. Se deja reposar la masa en un bol aceitado y cubierta con film engrasado hasta que doble ampliamente su volumen. Se extiende la masa con un grosor de 1 cm. y se cortan las rosquillas ( yo no pude resistirme a hacerme con un cortador de donuts) Se dejan reposar hasta que vuelven a doblar su volumen (unos 45 min. si no hace frío)


En una sartén profunda o en una freidora, se calienta abundante aceite de girasol (no debe humear) y se fríen las rosquillas un par de minutos por cada lado. Es conveniente no hacer demasiadas a la vez para que no se enfríe el aceite y poder darles la vuelta cómodamente, además, se hacen muy rapidito. Se colocan en papel abosorbente.


Glaseado: 
4 cucharadas de azúcar glass
3 cucharadas de agua
3 gotas de esencia de vainilla

Mezclar los ingredientes y cubrir los donuts todavía calientes con la glasa. Espolvorear ligeramente con azúcar glass.


¡Otro descubrimiento de una receta genial gracias a Whole Kitchen!




domingo, 19 de enero de 2014

Pfeffernüse: Reto Tía Alia

Llegó la fecha indicada para la publicación del reto de Tía Alia y una vez más me he decantado por la receta dulce. La verdad es que mi primera intención fue hacer la salada para variar, pero las pastas especiadas típicas de los países del centro y norte de Europa me parecieron demasiado irresistibles para dejarlas pasar.



Parece que la receta de Tía Alia es una versión chocolateada de estas pastas, ¿podría ser que "cleokoladen" sea una transcripción de lo que a ella le sonó cuando le dijeron "shcocoladen" en alemán...? En cualquier caso, como yo no las había hecho, me apeteció probar una versión más clásica (además, he de confesar que por esta vez, Tía Alia me ha confundido mucho con las cantidades e ingredientes: ¿3/8 de libra? ¿manteca blanca y/o mantequilla?) Me gusta mucho ceñirme lo más posible a la versión de Tía Alia, pero en esta ocasión le he sido infiel... 


Me inspiré en la receta que encontré en este blog y el resultado no pudo ser mejor, unas pastitas sencillas y de sabor delicado que han pasado a ser de las favoritas para el café.

Ingredientes: (salen 12 pastas, se pueden doblar cantidades sin problema)
115 gr. de harina de trigo
25 gr. de almendra molida
60 gr. de sirope de ágave (o de miel)
25 gr. de azúcar moreno
12 gr. de mantequilla blanda
1 huevo
1/2 cucharadita de levadura
1/4 cucharadita de pimienta negra molida
1/2 cucharadita de canela
1/4 cucharadita de nuez moscada
1/4 cucharadita de clavo molido
1/4 cucharadita de jengibre molido
1/2 cucharadita de anises


Derretir la mantequilla y mezclarla con el azúcar y el sirope. Mezclar la harina con la levadura y las especias y añadirle la mezcla anterior. Incorporar el huevo ligeramente batido y mezclar bien. Debe quedar una masa espesa y un poco pegajosa, pero que se puede manejar si nos humedecemos la manos.


Precalentar el horno a 170º. Hacer bolitas con las manos humedecidas y depositarlas en una bandeja de horno cubierta con papel. Hornear unos 10-12 minutos, o hasta que estén doraditas. 


Al sacarlas del horno, ponerlas a enfriar sobre una rejilla y espolvorear generosamente con azúcar glass.


Repito que son unas pastitas deliciosas, ¡todo un descubrimiento! 



sábado, 18 de enero de 2014

FALAFEL PARA WHOLE KITCHEN

Whole Kitchen, en su propuesta salada para el mes de enero nos invita a preparar un clásico de la cocina árabe: FALAFEL.
Ya estamos de vuelta con las propuestas de Whole Kitchen tras el paréntesis navideño y empezamos el año con una de lo más apetecible. Por lo menos a mi me encanta la gastronomía árabe, tan aromática y especiada, así que me puse encantada con la misma receta que nos han facilitado con la propuesta. La seguí paso a paso y fue todo un acierto, es fundamental utilizar los garbanzos remojados, pero sin cocer, para que la masa no se desbarate al freírla, y por lo demás el resultado es estupendo.





Ingredientes:
300 gr. de garbanzos remojados durante 36 horas (cambiando el agua a las 24)
1 cebolla
2 dientes de ajo
2 cucharadas de perejil fresco
1 cucharada de cilantro fresco
1 cucharadita de comino en polvo
Sal y pimienta
1 cucharadita de levadura química

Escurrir muy bien los garbanzos y secarlos con papel absorbente. Triturarlos en la Thermomix hasta que queden con una consistencia entre arenosa y granulosa. Reservar. Picar en el vaso el resto de los ingredientes y mezclar muy bien con la pasta de garbanzos. Si vemos que la masa está demasiado húmeda (al apretarla un poco rezuma líquido) podemos añadir un par de cucharadas de harina (si tenemos de garbanzos, aún mejor). Dejar reposar una hora.


Humedecer las manos y formar bolas de masa que aplanaremos ligeramente. Las freimos en tandas de tres o cuatro en una sartén con abundante aceite caliente (como haríamos con unas croquetas).





Las servimos calentitas, acompañadas de ensalada y una salsa de yogur, que preparamos con yogur griego, un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra, un diente de ajo muy picadito, el zumo de medio limón, sal y pimienta.





Una receta sencilla y deliciosa.





domingo, 12 de enero de 2014

Solomillos de pollo en salsa de mostaza y 'cus cus' de coliflor


Ahora que la mayoría de nosotros estamos intentando compensar los excesos cometidos en el último mes, viene bien recurrir a recetas saludables y ligeras, que no tienen por qué ser mustias o insípidas. Este pollo va cocinado en una salsa sabrosa y muy rica, nada pesada y acompañado de un falso cus cus, elaborado exclusivamente con verduras, que convencerá al más acérrimo detractor de lo verde. El plato entero se resuelve en un santiamén y el resultado es presentable en cualquier mesa, y no solo de diario.



Ingredientes para el pollo (para 3 personas):
1/2 kg. de solomillos de pollo salpimentados
1 cebolla picada
1 cucharada de harina
100 ml. de vino blanco
150 ml. de caldo de pollo
1 chorro de nata ligera para cocinar
2 cucharadas de mostaza (la que nos guste, yo prefiero la que tiene semillas enteras)
2 cucharadas de sirope de ágave (o de miel suave)
Aceite de oliva virgen extra

Calentar unas cucharadas de aceite en una cazuela y dorar los solomillos de pollo salpimentados. Reservarlos y, en ese aceite, rehogar la cebolla hasta que esté transparente. Echar la cucharada de harina y remover, incorporar el vino y dejar evaporar el alcohol. Añadir el caldo de pollo y llevar a ebullición. Echar la mostaza y el sirope (o miel) y remover. En este punto podemos triturar la salsa con una batidora (en la misma cazuela) para que quede lisita. Incorporar los solomillos (con el jugo que hayan soltado) y el chorro de nata, cocer el conjunto unos minutos y rectificar de sazón. Si queremos reducir la salsa, sacar la carne y dejarla cocer hasta que adquiera la consistencia deseada.


Ingredientes para el 'cus cus' de coliflor:
1 coliflor limpia y cortada en floretes
1 calabacín cortado en dados
1 puerro picado
1 pimiento verde picado
100 gr. de hojas de espinacas 'baby'
100 ml de salsa de soja
Aceite de oliva virgen extra

Picar la coliflor en la Thermomix, para ello echaremos en el vaso los floretes de dos en dos y los picaremos en vel. 4-5 unos 3 seg., o hasta que tengan el aspecto parecido a los granos de cus cus. Si no tenemos Thermomix, podemos utilizar una picadora. En una cazuela, calentamos unas cucharadas de aceite y rehogamos a fuego medio el resto de las verduras hasta que estén doradas (por supuesto, estas verduras se pueden variar en función de nuestros gustos y nuestra despensa). Incorporamos la coliflor y rehogamos unos minutos más. Añadimos la salsa de soja (al gusto, vamos probando y añadiendo más hasta que nos parezca sabroso) y removemos bien. 





Servir el pollo cubierto con la salsa y la coliflor como acompañamiento. ¡Retad a vuestros comensales a que adivinen de qué está hecho el cus cus!







martes, 7 de enero de 2014

Panettone con chocolate y toffee

Para cerrar la temporada navideña, en la que apenas he tenido tiempo para acercarme al ordenador (que no a los fogones) quiero publicar una estupenda receta de Panettone, Es una receta que encontré en el insuperable blog de Kanela y Limón , asi que poco más hay que contar; todas las recetas que he probado de este blog salen maravillosamente bien, están muy bien explicadas y las fotos, bueno, no hay más que verlas...



He seguido fielmente la receta de Cristina, únicamente he cambiado las frutas escarchadas y las pasas (en casa no son muy fans) por gotas de chocolate y de toffee. El resultado es buenísimo, un bollo de miga esponjosa y aromática que pienso repetir a menudo. Sin duda, la mejor receta de panettone que he probado hasta ahora.

 





Ingredientes para el prefermento:

30 gr. de levadura fresca
100 gr. de harina de fuerza
20 gr. de azúcar
70 gr. de agua tibia

Diluir la levadura en el agua templada y mezclar con la harina y el agua. Dejar reposar hasta que doble su tamaño.







Ingredientes para la masa principal:

5 huevos batidos
150 gr. de mantequilla blanda
170 gr. de azúcar
1 cucharada de esencia de limón
1 cucharada de esencia de vainilla
Ralladura de una naranja
Todo el prefermento
600 gr. de harina
1 pizca de sal
120 gr. de gotas de chocolate
80 gr. de gotas de toffee


Colocamos los ingredientes en la cubeta de la panificadora en el orden indicado en la receta (excepto las gotas de chocolate y toffee). Seleccionar el programa de sólo amasado y repetirlo 3 veces (en total, amasé 45 minutos). Volcar la masa en bol engrasado y taparla con papel film (engrasado también). Dejar que doble el volumen. Estirar la masa sobre una superficie ligeramente enharinada con las manos hasta que alcance forma rectangular. Distribuir las gotas de ambos sabores sobre la masa y enrollarla haciendo un rulo, que uniremos por ambos extremos y daremos forma de bola.
Yo dividí esta masa en dos partes y me salieron dos panettones de 800 gr. cada uno. Colocar la masa en sus moldes (que lleguen a un tercio del borde como máximo) y dejarla levar nuevamente.
Precalentar el horno a 180º y hornear los panettone unos 40 min. Si empiezan a dorarse demasiado pronto, bajar a 170º y cubrir la superficie de los bollos con papel de aluminio.

 

Fantástico el olor que desprende al hornear, y la miga, tierna y esponjosa, pero prieta, fabuloso...